DREAMS
Cap. 4 “...Yukko...”
Y ahí estaba Massu, echado sobre su cama aun podía sentir el calor de Yukko en sus manos, su corazón se aceleraba con el simple recuerdo de esa tarde.
Massu…solo un momento, fueron sus palabras las más maravillosas que este pudo escuchar, ese momento efímero en el que pudo tenerla entre sus brazos y hacer lo que tanto tiempo habia deseado, abrazarla. Abrazarla de verdad, no por obligación, no porque tenía que hacerlo, no porque así estaba escrito en el guion.
Esa noche Massu sentia que algo habia cambiado una esperanza nació de aquel suceso tan maravilloso, Yukko habia cambiado.
Esta vez su pecho había sido refugio de sus lagrimas, porque ella lo habia pedido, porque ella así lo habia querido, pero a pesar de eso él deseaba conocer el motivo de sus lagrimas, quería apartar toda tristeza de su rostro, pero esa tarde no encontró el momento oportuno para preguntarlo, estaba demasiado ocupado tratando de calmar a su corazón acelerado que se desbordaba de emociones por tenerla entre sus brazos, y…escuchar esa dulce palabra que ahora lo tenía en las nubes “…Massu…”
Este solo quedaba cada vez más maravillado con su compañera de aroma tan dulce, a fresas si ese era su aroma. El nunca habia estado tan cerca de una chica mas bien no de aquella manera, el amor nunca habia tocado a su puerta pero ahora estaba seguro que era ella la única que podía provocar esas sensaciones tan distintas hacia él. Solo ella. Al pensar en esa clase de cosas se daba cuenta de cuánto entendía a Koyama, Incluso el que ahora era un intruso en aquella relación podía ser contagiado por los sentimientos de aquella chica, ¿Que no pasaría con Koyama? el cual siempre estaba junto a ella. Un suspiro se escapo de sus labios al pronunciar el nombre de está fuera de sus pensamientos… “Yukko”….
El sabía que no estaba bien el tener esa clase de sentimientos, no cuando sabía quién era la chica de quien se estaba enamorado. La novia de su sempai. Pero por más que él quiso reusarse a tener aquellos sentimientos parecía que el destino le ponía pruebas cada vez más difíciles, pero bueno hasta cierto punto agradecía a este por permitirle tenerla un momento entre sus brazos y poder brindarle consuelo, aun que por dentro su deseo fuera más allá de convertirse en un simple pañuelo de lagrimas para ella. Como podía seguir pensando en eso, no podía, no debía, Koyama no se lo merecía.
Se palmeo la cara unas cuantas veces tratando de que con eso todos esos pensamientos se fueran y decidido se levanto de la cama para darse una ducha de agua fría y después echarse a dormir, pero cuando estaba quitándose la camisa percibió de nuevo ese aroma… a fresas… a ella, y sin poder evitarlo tomo delicadamente la prenda sumergiendo su rostro en ella absorbiendo el aroma de esta, suspirando al sentir que era real el aroma de Yukko aun estaba ahí incluso parecía poder sentir las lagrimas amargas que esta derramo sobre ella esa tarde y entonces se lleno de esa tristeza, ¿pero qué estaba haciendo?, se dijo así mismo.
Suspiro nuevamente tomando la camisa para guardarla cuidadosamente en el closet, no sería capaz de lavarla jamás si esta tenía su aroma.
Ahora si estaba mal, cualquiera que lo viera haciendo esas cosas, pensaría que era un maldito pervertido, lo peor del caso estaba oliendo su propia camisa y suspirando sobre ella, se estaba volviendo loco, la presencia de ella en su vida, el enamorarse por fin de alguien. Alguien como ella. Era difícil de entender.
Para él era muy difícil comprender esos sentimientos, ciertamente los tenia restringidos en algún lugar de su corazón, quizás por miedo al rechazo. Cuando era más joven y comenzaba a relacionarse con las chicas su amabilidad sin darse cuenta, fue formando una extraña barrera que le impedía siempre ir más allá de la amistad, así que resignado pensó que el amor no estaba hecho para él. Creencia que habia creído cierta hasta unas cuantas semanas atrás.
Pero el sentimiento que habia nacido hacia esa chica se estaba convirtiendo en un problema, problema que no estaba dispuesto a resolver, y así con la cabeza hecha un nudo y el corazón aun acelerado termino de bañarse y con la ropa adecuada se tiro en la cama, para después traer ese cálido recuerdo de ella nuevamente a su mente, bien entrada la noche Massuda se quedo dormido con la esperanza de soñar con ella. Pues en sus sueños era el único lugar en el que podría tenerla.
Y ahí estaba él frente a la puerta de aquel lugar, como todos los días desde que habia aceptado ese trabajo, pero en esta ocasión se sentia distinto, ¿Qué haría cuando la viera de nuevo? ¿Cómo debía actuar? ¿Debería decirle algo?, este se preguntaba nervioso y a la vez confundido, mientras esperaba tras la puerta.
Esa mañana todo se sentia extraño, todo se veía distinto para Massu, todo era diferente. Cuando al fin la puerta frente a él se abrió, y una pequeña joven apareció tras la puerta no debía tener más de 13 años nunca antes la habia visto por ahí, pero aun así la saludo amablemente para después mostrarle su identificación y así continuar su camino a paso lento. Por primera vez en toda su vida deseaba no ser tan puntual.
Massu sentia el palpitar de su pulso por todo el cuerpo por que se sentia tan nervioso, ¿Quería verla? ¿Era eso? Deseaba que al abrir la puerta del camerino ella estuviera ahí. Pero que les pasaba a las personas de ese lugar ¿Por qué ponían a un hombre a compartir camerino con una chica?, mas aun ¿por qué precisamente esa chica?
Este habia llegado a su destino dudando en si debía abrir la puerta o no aun era temprano quizás todavía no habia llegado pero si la abría y esta estaba ahí cambiándose, no lo mejor era tocar antes de entrar ¿Verdad?
Massu seguía parado frente a la puerta inmóvil con una mano en la perilla de la puerta y la cabeza inclinada hacia abajo observando la alfombra, ¿Qué debía hacer? Se preguntaba, pero sus nervios no lo dejaban pensar con claridad, cuando sintió un tirón en la mano que sujetaba la perilla y la puerta frente a él se abrió, llenándolo de ese rico aroma con el que un día antes habia estado delirando a fresas era ella, su mirada seguía clavada en el suelo, su corazón latina desbocado no habia más dudas realmente estaba enamorado de esa chica.
Sus mejillas ardían, cuando al fin se lleno de valor, levanto la mirada descubriendo el rostro inexpresivo de la chica frente a él, bajándolo inmediatamente de aquella nube de esperanza que habia alimentado el día anterior.
-Permiso, dijo la joven fríamente después de que Massu levantara el rostro.
El color rojizo del rostro de Massu fue cambiado al instante por una cara pálida y triste.
Es verdad que él no esperaba que ella lo aceptara, solo que no pensaba que ella lo siguiera tratando tan fríamente, ¿no podía esperar mucho de aquello verdad?, pero en verdad esperaba que ella fuera menos fría.
Un suspiro surgió de los labios de Massu su mirada ahora se encontraba contemplando la alfombra de la entrada del camerino.
-Me vas a dejar pasar, se escucho la voz nerviosa de Yukko.
Massu levanto la mirada nuevamente para encontrarse con los ojos nerviosos de aquella joven.
-Yo…Massu se armo de valor cuando…
-O-ha-yoo!!! La voz de Koyama se escucho detrás de él, cuánto tiempo llevaba ahí se pregunto nervioso y de inmediato se aparto del camino de la joven frente a él.
-Keii-chan!, grito la joven a espaldas de Massu lanzándose a los brazos del recién llegado.
-Yukko-chan está muy feliz hoy, dijo Koyama despegándose un poco del abrazo para mirarla.
Massu continuaba de espaldas a esos dos inmóvil, pero en cuanto los escucho comenzó a morderse el labio inferior conteniendo un extraño sentimiento amargo.
-Para ella nada habia cambiado, dijo tristemente en un susurro que nadie escucho.
-Massuda-san Ohayoo!!! La voz de Koyama se dirigió a este.
Massu aun continuaba de espaldas, a ellos respondiendo así su saludo.
-Sempai Ohayoo!
-Et..etto ¿Massuda te encuentras bien?, pregunto Koyama algo preocupado intentando mirar al chico que le daba la espalda.
-¿Por qué abría de encontrarme mal? estoy de maravilla, respondió este a la pregunta de Koyama sin poder ocultar sus tristeza, para después entrar al camerino cerrando la puerta tras él.
-¿Massuda-san se encuentra bien?, se pregunto este en voz alta mientras contemplaba la puerta que se habia cerrado frente a él. Koyama sabía que algo andaba mal.
- Massuda-san... Koyama alzo la voz estaba dispuesto abrir la puerta del camerino, quería ayudar sabia que algo en la voz de Massuda le decía que no se encontraba bien cuando, era su deber como su sempai tratar de ayudarlo pero Yukko que se encontraba aun abrazada a él lo jalo ligeramente del brazo, este dirigió su mirada a la joven que inclino la cabeza negando con esta la acción de Koyama.
-Yukko-chan, dijo este en un susurro sin entender lo que pasaba, mirando sorprendido a la joven que permanecía con la cabeza inclinada.
-Keii-chan, dijo la joven con un tono serio y bajo.
-¿Pasa algo?, respondió este en un tono que sonaba preocupado. Tegoshi no acostumbraba a ser serio, jamás y menos vestido de Yukko.
-… No es nada…Keii vayamos al ensayo, su voz de Yuya salió.
Koyama contemplaba confundido a la joven frente a él que aun permanecía con la cabeza inclinada. ¿Por que habia hablado como Yuya?, el jamás habia usado su voz normal mientras vistiera de Yukko ¿qué le pasaba? ¿Por qué estaba tan raro? las preguntas brotaban en su cabeza con miles de pensamientos extraños Koyama se estaba preocupando en serio.
-Yu…
-Ohayoo Godzaimasu!!! Una voz se escucho a espaldas de ellos.
El cuerpo de Koyama se tensiono al reconocer la voz detrás de él. Yukko quien habia permanecido con la cabeza inclinada al escuchar aquella voz levanto la mirada para apreciar la sonrisa del recién llegado.
-Shige!!! Ohayoo!!! Yukko corrió a los brazos del recién llegado con una amplia sonrisa.
-Yukko-chan, este le sonrió al tener a aquella linda joven en sus brazos.
-Tenía tiempo de no verte Shige, dijo la joven soltándose amablemente del abrazo
-Jajaja lo sé, pero he tenido que ir a la puesta en escena de Nishikido-kun.
Al termino de estas palabras el rostro de Yukko cambio desvaneciendo su sonrisa cambiándola por tristeza, el escuchar su nombre era algo terrible para sus oídos en ese momento, no sabía si podría soportarlo sin ponerse a llorar nuevamente.
Shige quien vio el cambio en el rostro de Yukko pudo notar que esto le afectaba de alguna manera, cambiando así el rumbo de la conversación hacia otro lado.
-Y dime ¿cómo te va con el estreno?, dijo este tratando de escucharse casual.
-Muy bien ya casi todo está listo verdad Keii-chan, esta miro al joven tras ellos que parecía no estar poniendo atención.
-Ah…Hai!, este disimulo bostezar esa situación para él era muy incómoda.
-Keii-chan estaba distraído, dijo la joven sonriendo, es verdad Shige-san hoy no es la sesión fotográfica ¿qué haces aquí hoy?
La mirada de Shige se habia quedado clavada en Koyama quien disimulaba estar adormilado, ignorándolo por completo.
-Hoy he venido porque Risa-chan me ha llamado al parecer hay que hacer unos arreglos y unas cuantas modificaciones de las obras.
-¿Risa-chan te mando llamar? Pregunto Yukko sorprendida.
-Así es, Shige asintió buscando la mirada del joven alado de Yukko.
-Ya veo entonces debe ser importante.
-Claro no me llamaría de no ser así, ella siempre trata de hacer un buen trabajo por eso siempre se fija hasta en el más mínimo detalle.
-Claro de eso no tengo dudas. Sonrió Yukko
-Bueno Shige-san, Keii-chan y yo debemos irnos el ensayo está por comenzar.
-Claro Yukko-chan, nos veremos pronto. Este les dedico una sonrisa.
-Adiós, Kato-san dijo Koyama tomando la mano de Yukko.
Shige los miro alejarse Koyama tenía tiempo de no ser el mismo antes solían llevarse muy bien incluso salían después del trabajo para hablar y tomar algo, pero tenía tiempo de no ser así siempre habia querido preguntárselo pero parecía que este le evitaba. Shige suspiro al verlos desaparecer de su vista para después dirigirse al lugar donde se encontraría con Risa. Se sentia algo incomodo de verlos tan cercan, más bien él no quería verlos tan cerca, en qué momento esos dos se hicieron tan cercanos se preguntaba sin comprender el por qué de su molestia.
Massu quien habia permanecido tirado en la puerta habia tapado sus oídos para no escuchar mas su voz, su corazón se encontraba herido todas sus ilusiones se habían ido al ver la frialdad con que aquella chica lo habia tratado, una lagrima recorrió su mejilla mostrando su desilusión, ¿tan cruel era el amor?, pudo ser cual quiera ¿no es así?, en el que se refugiara. ¿Pero no? habia sido en el le habia llamado Massu cariñosamente ¿porque lo ilusionaba de esa forma? ¿Por qué?
Cansado de llorar y sin ganas se levanto después de secar aquellas lagrimas que habia derramado, y se dispuso a ponerse el vestuario de prueba que previamente habían confeccionado para él, se miro al espejo viendo lo bien que lucía en ese traje pues ni el mismo habia podido vérselo puesto así que su sorpresa fue mucha al ver lo bien que lo hacía ver. Este se miro al espejo antes de salir, mostrando aun una sonrisa apagada.
Al llegar al ensayo pudo ver que este ya habia comenzado Koyama y Tegoshi estaban en sus debidas posiciones, el director habia puesto un sustituto para Massuda el cual al verlo fue relevado y Massu pudo tomar su lugar.
-Minna-san fue un gran trabajo el que hicieron el día de hoy grito el Director con voz grave e imponente pueden retirarse y no olviden que mañana es la sesión fotográfica para los post de el estreno.
-Hai!!!, la voz a unisonó se escucho por toda la sala y poco a poco los actores fueron desapareciendo del lugar Massuda se dirigió rápidamente a los camerinos para cambiarse pero antes de salir del salón pudo notar como Tegoshi tomaba la mano de Koyama mientras el director hablaba con ellos.
Massu no pudo evitar ver ese acto en verdad quería pensar que ella habia sentido algo al igual que él pero como podría ella sentir algo por el teniendo a Koyama ¿no es así? suspiro amargamente recordando esa escena mientras terminaba de sacarse el vestuario, tenía que darse prisa pues no quería demorarse demasiado y hacer esperar a Risa.
Massu habia tenido muchos problemas con sus diálogos pero Risa siempre estuvo ahí para apoyarlo incluso le ofreció ayudarlo con sus líneas. Tenían solo algunos días de estar trabajando juntos y con tan poco tiempo este habia mejorado notablemente, solo que aun le era difícil concentrarse bien cuando era a Yukko a quien abrazaba.
Massu se dio una ducha rápida y después de arreglarse se dirigió al lugar de siempre todo el elenco se habia ido del lugar así que ahora el escenario les pertenecía, pero Risa estaba retrasada por lo regular ella llegaba antes que él, Massu se estaba preocupando cuando a los pocos minutos su móvil comenzó a sonar era Risa. Este respondió inmediatamente para enterarse que ella no podría asistir a su ensayo esa noche por cuestiones de trabajo, que por cierto aun no sabía cuál era exactamente su trabajo.
Massu dejo escapar un largo suspiro pero aun así decidió hacer caso a lo que esta le dijo antes de colgar que la función tenía que continuar sin ella y así lo hizo decidió ponerse a ensayar cada línea pues ya conocía el guion por completo gracias a la ayuda de Risa, ella realmente era un persona muy amable. Pensaba Massu.
Después de la larga conversación con el director Yukko regresaba sola al camerino, Koyama se habia adelantado pues habia recibido una llamada y al parecer ahora tenía algo que hacer así que después de despedirse cariñosamente de ella que por cierto al hacerlo parecía despedirse de una novia Yukko se quedo sola recorriendo el pacillo.
Llego a los camerinos asimilando que Massu ya no estaría hay pues lo habia visto salir hace algún tiempo para su sorpresa las cosas de este seguían en el camerino, le pareció extraño ¿dónde estaría tan tarde? Se pregunto pero antes de seguir con sus pensamientos en aquella dirección, se percato de que algo le hacía falta su móvil. Lo habia dejado en el salón de ensayos así que decidió regresar por él, al llegar a este pudo escuchar la voz de alguien que aun estaba ensayando, esa voz era de, era Massu quien estaba ensayando las escenas que tenían juntos, era por esa razón que habia mejorado tanto, él se quedaba hasta tarde para ensayar aun mas, ni ella misma supo en qué momento comenzó a sonreír tontamente al verlo ensayar y sin saber por qué salió al escenario continuando las líneas que le pertenecían a ella.
Su cara estaba roja se habia puesto nerviosa ¿Por qué? si siempre ensayaban juntos cual era la diferencia entre ese ensayo y los anteriores, Yukko sintió la mirada atónita de Massu quien al verla llegar continuando sus líneas se quedo sin las palabras, Yukko algo incomoda por la mirada trato de actuar con naturalidad haciéndole una seña a este de que debía continuar y este aun con los ojos completamente abiertos continuo nerviosamente sus líneas y así lo hicieron un largo tiempo. En esta ocasión Massu pudo sentir que Yukko era distinta, incluso se tomaba la molestia de corregirlo en las partes que ella creía conveniente fuera más intensa la actuación. A Yukko le parecía que Massu habia mejorado muchísimo desde que comenzaron los ensayos quizás si estaba hecho para eso se decía.
-Creo que es todo por hoy ¿no crees?, ya es algo tarde, sonrió.
Massuda quedo como tonto al ver la sonrisa tan cálida de la joven actriz.
-Sí, mañana continuare con mi ensayo muchas gracias por la ayuda, Massu se inclino para agradecerle.
-Eh! Has estado ensayando todos los días hasta tarde, le pregunto esta sorprendida.
-Sí, no quiero seguir causándole problemas a Tegoshi-san ni a los demás que se esfuerzan tanto porque la obra salga bien, además Risa-chan cuenta conmigo.
-Risa-chan.
-Si ella me ha estado ayudando con mis diálogos hoy no ha podido venir pero te agradezco mucho la ayuda.
-Ya veo, has mejorado mucho Risa-chan ha hecho un buen trabajo, y ahí estaba de nuevo regalándole esa hermosa sonrisa, cuanto más duraría ese sueño.
-Bueno debemos irnos no lo crees. La joven avanzo sonriéndole amablemente.
Massu asintió siguiéndola con una gran sonrisa en el rostro ella era tan linda así, aun no podía creer lo que le estaba pasando ella estaba ahí hablando con el siendo amable parecía un sueño, un sueño del que no quería despertar, pensaba y así caminaron juntos en silencio. Hasta que algo lo saco de sus pensamientos y esa bella armonía que se habia formado.
-Tegoshi, una voz sonó al final del pasillo
Yukko al escuchar aquella voz detuvo su paso para después seguirlo más rápido.
Los pasos apresurados del joven que grito se escucharon resonar por el pasillo Massu quería alcanzar el paso de Yukko que ahora parecía huir. Esa voz era de…
-Tegoshi, por favor. La voz tras ellos sonó desesperada.
Yukko detuvo su paso y Massu lo hizo unos pasos tras ella, Si era el.
-Nishikido-kun, necesita algo respondió fríamente sin mirarlo.
-Tegoshi por favor quiero hablar contigo, solo un momento... por favor.
Yukko apretó con fuerza el vestido que llevaba puesto acto que Massu pudo notar. ¿Qué era lo que estaba pasando?
-Nishikido-kun usted y yo no tenemos nada de qué hablar. Su voz sonó apagada estaba por retomar su camino, cuando Ryo la tomo del brazo como antes pero esta vez la abrazo girándola para que lo mirara.
Los ojos de Yukko se llenaron de lágrimas al sentirse nuevamente en los brazos de Ryo.
Massu seguía parado frente a esos dos como un cero a la izquierda tratando de entender esa escena que lo habia dejado en shock.
Yukko alejo su mirada de los ojos de Ryo para encontrarse con los ojos de Massu, y en cuanto los vio reacciono para tratar de soltarse de los brazos de Ryo.
-Suéltame, Ryo-chan
-Solo escúchame.
La forma en que este sujetaba a Yukko molesto a Massu quien habia estado observando la escena sin saber que hacer pero un impulso que no pudo evitar seguir hizo que este interfiriera alejando las manos de Ryo del cuerpo de Yukko.
La mirada de ambos se quedo en Massu quien habia arrebatado a Yukko de los brazos de Ryo para tomarla entre los suyos y resguardarla en un ligero pero protector abrazo.
-Mocoso, ¿qué haces? Dijo este molesto
-Aléjate. Es todo lo que este pudo articular ni siquiera él sabía lo que estaba haciendo.
-Tegoshi…, la mirada de Ryo ahora estaba clavada en la joven, quien al verlo hundió su rostro sobre el pecho de Massu.
El corazón de Massu se desbordo al sentirla tan cerca.
-Está bien Tegoshi ya hablaremos en otro momento, un suspiro salió de sus labios de este para después contestar su teléfono el cual habia comenzado a sonar así que molesto se retiro del lugar.
Las manos de Yukko estaban posadas sobre el pecho de Massu con la cabeza hundida en el, unas lagrimas comenzaron a desbordarse cayendo sin parar por el pecho de este.
Massu se percato del llanto de la joven y pasando ligeramente sus brazos por la cintura de esta la abrazo delicadamente.
Yukko en cuanto sintió nuevamente el cálido abrazo de Massu, respondió a este, para continuar llorando resguardada en sus brazos.
Cuando un leve susurro salió de los labios de Yukko directamente sobre el oído de Massu.
-…Massu… tus brazos son tan cálidos…
Ahhh!!! me encanto me encantoooo!!!!! esta muy lindooo!!!!!!! >//<!!!,neh neh ya espero con ancias el sigiente :D!
ResponderEliminarcuidate -3-!
sigue sigue sigue sigue~~!!!! estoy emocioonadiiiiisima con esta historia, Ri-chan de verdad me ha gustado mucho~~!
ResponderEliminaren verdad estan muy interesantes quiero leer el q sigue pobre yukko, pobre masu, pobre ryo!!
ResponderEliminarkyaaaaaaaaa... me encanto... onegai continualo... que emocion... quiero saber que pasara con massu y tego..
ResponderEliminarpsd: estoy de acuerdo con shige con respecto a Koizumi san XD