viernes, 20 de septiembre de 2013

En la Distancia~


                        En la Distancia~




Podría decirse que quizás me acostumbre a estar solo y de vez en cuando acompañado. Soy una persona de estar mas en casa que fuera de ella, tal vez eso es lo que hizo aun mas larga esa brecha que nos unía.

Al principio era dueño entero de su tiempo, toda la atención me pertenecía, pero era normal en aquel entonces era lo nuevo, lo de moda del momento, pero nuestra relación 
¿Era solo eso? No, claro que no lo era, nunca lo fue realmente, solo que ninguno de los dos era lo suficientemente valiente para admitir que dependía del otro para ser feliz.

Y así fue como esto se volvió serio con palabras, cuando dejamos de callar esos sentimientos que estallaban como bombas dentro de nosotros, pero entonces vino la pregunta mas importante 
¿Que debíamos hacer? ¿En verdad queríamos estar juntos por siempre? Pensamos en todo en nuestras familias, amigos, compañeros en todos aquellos que podían ser afectados por nuestra decisión impulsada en la nada, realmente cuantas parejas homosexuales tenían éxito, ¿Y la discriminación? Seriamos capaces de soportar todo lo que se avecinaba. Sin contar el hecho mas importante de que viviríamos, sería difícil para una pareja como la nuestra conseguir trabajo, un lugar donde vivir... Tal vez era demasiado para nosotros, aun éramos jóvenes, quizás seguir por caminos distintos era lo mejor...

Pero aun así, después de tantas dificultades que le vimos a mantener nuestra relación, decidimos por aquella que nos hacia mas felices y sin importarnos nada mas que nosotros. 

Obviamente lo discutiríamos y hablaríamos con nuestras familias, pero nosotros no íbamos en busca de permiso o aceptación, solo les informaríamos de lo que estaba pasando, de aquello que pasaría, que nos amabamos y queríamos estar juntos como pareja, que no buscabamos una aprobación de su parte, porque estuvieran de acuerdo o no, era algo que ya habiamos decidido y nada ni nadie nos iba a detener.

Comenzamos por su familia. Por su parte su familia fue muy amable y  comprensiva con nosotros, me sentí tan aliviado de ver que su madre el ser más  importante para el, no me juzgaba y aceptaba, pero fue aún más importante para mi el momento en que 
ella tomo mis manos y con lagrimas en los ojos, me pidió que cuidara bien de su hijo, eso simplemente me dejo sin habla. Ella lo aceptaba. Ella nos aceptaba a los dos. Eso me hizo muy feliz porque me estaba confiado lo que ella más amaba en la vida, y no la defraudaría.

Pero el del problema ahi era yo, titubeante y temeroso no fui capaz de llegar con la misma valentía con la que el llego a su casa y me presento con su familia. Yo no podía ser tan valiente cuando aún me sentía inseguro, mis piernas temblaban, tenía miedo de lo fuera a pasar, no quería ver sufrir a nadie. Pero tenia otro temor el de los cobardes, la incertidumbre me consumía y no hacia nada por detenerla, y si me detenía yo, y si terminaba todo en ese momento, seria mas fácil, pero no quería algo mas fácil, lo quería a el, por el debería ser fuerte se lo prometí a su madre y si no lo cumplía me sentiría avergonzado de mi mismo y de mi poco valor como persona. 

Yamapi siempre era una persona un tanto seria, pero era comprensivo y amable, así que para el era fácil notar, el cambio de mi rostro, el temor en mi mirada, fue entonces, que mientras caminábamos me detuvo un momento y mirándome a los ojos me dijo:

-Kame, sabes que Te Amo verdad, y no estaría aquí si no lo hiciera. Pero... quizás...yo me adelante a todo esto, tal vez tu no estabas listo y no te forzare a decir algo de lo que posiblemente despues te arrepientas...puedes pensarlo mejor si gustas...no es necesario apresurar las cosas, yo no tengo prisa, puedo esperar el tiempo que sea necesario.

Mientras el hablaba en ligeros susurros me di cuenta como su mirada iba descendiendo, mi corazon se fue encongiendo del mismo modo, era una sensación inexplicable y ciertamente dolorosa, entonces lo abrace y mi corazón se inundo de cierta paz en sus brazos, después de eso y sin temor a represarías lo bese intensamente como nunca antes lo había hecho, porque el estaba dando todo por mi y deseaba corresponder su amor del mismo modo así y tomandolo de la mano entre con el valor suficiente para decirle al mundo lo mucho que lo amaba. Aun recordando eso puedo sentir como mi corazón late desbocado por el.

Escuche decir ; ¿Amor? ¿Que si esto es amor? En muchas ocasiones mientras estuvimos en casa, pero yo respondí con la verdad... Es algo mas que eso, es algo mas que amor... Es algo más del alma. 
Puedo sentir su triste en el corazón, su soledad, su alegría todo lo que sus ojos me reflejen puede serme transmitido ¿Entonces que es?... Después de una larga conversación, no les quedo más remedio que asimilar que mi alma y corazón estaban únicamente con el y yo iría ahí donde el este.

Han pasado ya varios años desde entonces, desde que nuestras vidas se unieron y separaron.

En la actualidad nos vemos tan poco tiempo que he llegado a sentirme vacío, no puedo quejarme tengo amigos, compañeros y familia, pero aun así me falta el, sus ojos, sus manos, sus labios... necesito de el para admirar la belleza del mundo, los colores, los aromas, el sol... necesito de sus latidos para vivir y de su cuerpo para sentirme vivo, respirando su aliento por las mañanas. Esa es la verdadera vida para mi...

-¿Kame?- Escuche entonces esa voz bajo el pasillo y mi cuerpo se levantó automáticamente ante aquel llamado.

-¡Amor!- Respondí al ver su rostro sonriente y me lance a sus brazos, este me abrazo con mas fuerza dandome ligeras vueltas llenas de alegría.

El también me había extrañado, aun que quizás el no lo exprese de la misma forma que yo...

Ahora nada me importaba mas que estar en sus brazos, sintiendo la calidez de su cuerpo, y respirando el aroma de sus cabellos, cuando...

-Guaw! Guaw!-

-¡Oh! Pero que es esto Pi- Una pequeña bola color miel comenzó a moverse por el pasillo, emitiendo sonidos graciosos.

-Bueno, sabes que por mi trabajo estoy de viaje mucho tiempo y estaba pensando que quizás cuando me voy por tanto tiempo...no se...tal vez... te sientes...solo. Pensé entonces que estaría bien traerlo para que te haga compañía mientras vuelvo.

-Ya veo, es bastante lindo- Respondí acariciando la cabeza del nuevo inquilino.

-Lo es,deberíamos ponerle un nombre, mmm...- Mi novio parecía tomárselo muy en serio.

-Oh! Ya se, Pi! Yamapi-chan!-

-¿Eh? ¿Yamapi-chan? Cómo yo-

-Tu eres Tomo además mira parece que le gusta esta meneando la colita, si definitivamente es igual a su padre-

-Nos hemos convertido en una familia?-Pregunto  un tanto apenado.

-Pues es pequeño, necesita de un papa y una linda mama- Le sonreí mientras seguía acariciando al pequeño Yamapi.

-Bueno pero porque yo soy el papa, podría ser la Mama- 

-Tienes razón tu tienes más bubis que yo-

-Que cruel!-

-Pero yo soy más lindo así que seré la mama-

Y con esa misma atmósfera seguí sonriendo como idiota al ver el rostro avergonzado de mi novio, era bastante lindo, no solo por su rostro si no porque era lindo saber que el estuvo pensando en mi todo el tiempo, y si el pensó que tal vez me sentía solo, es porque el debe sentirse aun mas solo que yo mientras esta de viaje. Pero el no es la clase de personas que se quejan y causa problemas, mas bien es la clase de persona que primero se preocupa por los demás, antes de preocuparse por sí mismo. No puedo quejarme en los últimos años lo he visto ir y venir sin quejarse por cansancio y con una enorme sonrisa para mi, el siempre procura hacerme feliz sin saber que lo que mas me hace feliz es estar a su lado, pero bueno el es así y esa es una de las tantas cosas que me ha mantenido enamorado de el. La forma tan torpe de decir lo mucho que me ama...

-Yamapi-chan estará aquí para cuidarme entonces ¿Eh? y si me enamoro de el- Juguete con mis manos.

-Mmm...- Su expresión llamo mi atención, haciendome mirar como desanudaba su corbata y la arrojaba al suelo, con esa misma mirada me levanto entre sus brazos.

-Que haces?- Me tomo desprevenido haciéndome soltar un ligero grito.

-Supongo que entonces debo trabajar duro para que no te olvides de mi mientras me voy- Continuo diciendo mientras me subía a la habitación.

Esa expresión de ternura y picardía, fue lo suficientemente eficaz para comenzar a derretirme como chocolate en sus manos.

Sentí las suaves sabanas y el fresco aroma de sus labios...

-KAME...TE AMO...-

Sus manos recorrieron ligeramente mi cuerpo... solo el podía encender cada parte de mi alma de tal modo que solo un susurro era suficiente para enloquecerme y desear todo de el. Sin pensármelo dos veces desabotone su camisa y sumergí mis manos dentro de su espalda tocando su piel calida y suave; aparto con delicadeza mis manos y levantándome un poco me quito la camisa, se detuvo para mirarne de una forma tan penetrante que mi cuerpo se erizo de nuevo, me tomo el rostro y me beso lento y apasionado, bajando sus manos hasta mis gluteos y ...

-Guaw! Guaw!-

-¿?- Ambos nos detuvimos, a mirar al pequeño Yamapi-chan quien meneaba la cola de un lado a otro, mientras mordía el pantalón de mi novio.

-¿Crees que este celoso?- Me pregunto en tono serio.

-Crees que sea eso? Yamapi-chan es cierto eso- Le llame y este corrió hacia mi. -Aun es pequeño ¿tendrá hambre?- Pregunte, pero mi novio solo se encojio de hombros.

Lo levante para mirar su barriguita cuando...

-Pi- No podía creerlo.

-Si- Respondió este sentándose a mi lado.

-Yamapi-chan es hembra-

-¿Eh? En serio- Pregunto sorprendido mirando al cachorro.

-Porque pensaste que era un macho-

-Bueno tenia la cara tierna asi que solo lo supuse- Respondió un tanto apenado.

*Una mas de las cosas que amo de ese hombre.*

-Debe tener 
hambre no ha dejado de lamer mis manos o quizás tiene sed- 

-Oh! Habías tenido mascotas antes-

-No, cariño se llama sentido común, así que con permiso mi hija y yo nos vamos de shopping-

-No me dejen- Este se abotono la camisa, y nos alcanzo abajo me tomo de la cintura y dándome un ligero beso en los cabellos, salimos juntos ahora como una familia feliz con nuestra nueva hija Yamapi-chan...

Tal vez me sentía solo porque tenia miedo de perderlo en alguna parte de la historia, pero después de ver todo el amor que el siente por mi y la forma en la que a pesar de los años me sigue mostrando su amor como el primer dia me siento seguro y tranquilo, ya que ahora en la distancia hay alguien mas que espera conmigo su regreso...

-Kame Amor!, 
Yamapi-chan! He Vuelto!~